jueves, 19 de enero de 2012

Exposición sobre prostitución


En esta clase de epd, nuestras compañeras italianas expusieron su tema trabajado, el cual es la prostitución.
Comienzan haciendo una comparación entre la situación de la prostitución en Italia y la situación de la  prostitución en España.
En ella nos explicaron en que consistía la prostitución, los diferentes puntos de vista y la diferente legislación correspondiente a este tema.
Uno de los puntos que mas me ha llamado la atención han sido las diferencias legislativas entre países. Por ejemplo, España tiene el modelo despenalizador, el cual tiene una ideología liberal, porque permite la prostitución, pero no asegura derechos y deberes laborales.
El caso de Italia se acercaría al modelo prohibicionista, el cual es una mezcla de moral y derechos.
Otros modelos serían el abolicionista y el despenalizador/reglamentista.
 Este último modelo es defendido por Alemania, en el que la prostituta es sujeto de derechos y obligaciones, incluso seguridad social, por lo tanto, en Alemania, se  tiene a la prostitución como cualquier otro trabajo.

Desde mi punto de vista, el mejor modelo es el Alemán, puesto que garantiza a la mujer una seguridad en su puesto de trabajo. Cosa que debería de ser obligatoria en los demás países, ya que considero que la prostitución no debe de ser un trabajo muy agradable para las mujeres, al menos en la inmensa mayoría, porque existen prostitutas que lo son por voluntad propia. En cuanto a las que son prostitutas por obligación, ya sea por aspectos económicos como por explotación por parte del trafico de blancas, debemos conciarnos más con este tema. En pleno siglo XXI es denigrante que una mujer se venda para satisfacer los deseos de un hombre, habiendo mil empleos de diferentes ideologías en el mundo. Y lo peor es que muchas veces, son un aliciente turístico, como muestro en este vídeo.


Debemos tomar el mando para que profesiones como esta, que reprimen a la mujer, dejen de existir, o al menos, dejen de existir por imposición.
Que tengais buena tarde,
Vanesa

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